El complejo panorama político que viven Andalucía, España y el mundo en su conjunto, consecuencia de la crisis pandémica Covid-19 y la guerra de Rusia y Ucrania, nos ha llevado a una situación crítica de las estrategias de progreso y recuperación que en España se afrontaban con el protagonismo del Gobierno de Coalición y los apoyos que lo han soportado desde su origen.
Manuel Armenta
7 de Junio de 2022
La crisis sanitaria que tanto daño provocó en la vida política, social, económica, laboral y en la convivencia, con el gobierno progresista de España y las políticas de recuperación de Europa, abrió puertas para avanzar en la Democracia, la Libertad, Derechos e Igualdad que las mayorías sociales necesitaban y demandaban frente a los recortes que desde 2011 se soportaban por las políticas ultra-derechistas de los gobiernos. Igualmente, para afrontar la crisis climática y medio-ambiental que tanto daño está causando al planeta, necesitada de políticas alternativas a los sistemas energéticos, productivos, de construcción y consumo, y de los sistemas armamentísticos que tanta destrucción causan.
La guerra RUSIA-UCRANIA ha roto e influido de manera negativa y determinante en la situación política, social y económica que ya vivíamos, así como en la reconstrucción que en España tanto necesitábamos para avanzar y mejorar frente a la acumulación de daños y recortes que nos habían impuesto por la crisis económica y sanitaria. La guerra, no solo por su origen, sino por su desarrollo y evolución entre los contendientes y a nivel mundial, quiebra la filosofía de entendimiento y convivencia necesaria para avanzar y progresar en todos los órdenes de la vida, por la implicación directa armamentística impuesta, no solo por EEUU y la OTAN, sino asumida por una gran mayoría de países (incluida España).
Una nueva crisis política se ha impuesto alterando las condiciones económicas y sociales en todos los órdenes de la vida: sistemas productivos en origen de materias primas para el consumo energético, que dañan la ya mala situación que vivíamos las personas y el planeta, y el reforzamiento de la industria armamentística que daña y destruye la vida de personas, las ciudades y el planeta. Crisis política que refuerza las políticas dañinas y destructivas del interés general, los derechos básicos y democráticos y el medio ambiente, reforzando las filosofías y políticas ultra-conservadoras de las derechas.
Las Elecciones del 19-J en ANDALUCÍA adelantadas por su gobierno no son ajenas a esta tendencia de reforzamiento político en las instituciones y en la gobernanza del PP-C´s-Vox, y sus políticas más ultra-conservadoras que pongan fin a los avances y mejoras en políticas sociales y en derechos democráticos que se están implementando desde el gobierno central, a pesar de no alcanzar efectos positivos en condiciones de vida de los más necesitados por la crisis energética y productos básicos de consumo que se encarecen excesivamente.
Situación política que a pesar de la reconstrucción progresista, también reporta a partidos de las derechas y a sus más reaccionarios líderes, fortaleza y prestigio incomprensible en la sociedad y Comunidades Autónomas, como se evidencia en Galicia, Andalucía, Madrid y Castilla y León, así como en el reciente congreso del PP en Madrid que ha marcado pauta de consolidación de la derecha recalcitrante y el respaldo social a pesar de las políticas tan anti-sociales y anti-democráticas que aplican desde sus gobiernos.
Las Elecciones de Andalucía van a marcar pautas y caminos a seguir por su importancia territorial y social en el conjunto del Estado. La situación emplaza al conjunto de fuerzas políticas de izquierda y progresistas y a los líderes y movimientos sociales a priorizar el entendimiento en la búsqueda de confluencias y coalición para un gobierno que priorice las políticas más sociales para afrontar las precarias condiciones de vida que se viven en Andalucía, así como el fortalecimiento de los sistemas y servicios públicos básicos: Sanidad, Educación, Servicios Sociales y las políticas que nos permitan avanzar frente a la Crisis Energética.
La realidad política consecuencia de crisis confluyentes, sanitaria y de guerra, nos emplaza cada vez con más fuerza a quienes creemos en la justicia social y la igualdad como una prioridad para avanzar por el bien común hacia modelos de sociedad Justas y Democráticas no anteponer el interés partidario ni el liderazgo al entendimiento, para así demostrar y mostrar: convencer a la sociedad y a las mayorías sociales, que el interés general prima de verdad al particular, y en la medida de lo posible, conseguir que en los procesos electorales las mayorías sociales sepan distinguir entre quienes lideran de verdad sus intereses generales sin caer en la palabrería, y el engaño de los que destruyen la libertad y los derechos de las personas en interés propio.
Andalucía es
precisamente una de la comunidades que aplican políticas destructivas y
discriminatorias en servicios públicos perjudiciales para amplios sectores
de la sociedad más necesitados; en la Sanidad: ocupa el penúltimo lugar de las
17 CC.AA. en peores servicios, (cuando en el 2014 ocupaba el 6º).
Y entre otros muchos:
- En presupuesto sanitario
el puesto 14 con 1.388,86 E/por habitante (frente a 1.809,41 del País Vasco);
en camas hospitalarias el más bajo con 2,19 por cada 1.000 habitantes y
en hospitales públicos el penúltimo con 1,7 por 1.000 habitantes; en el ratio
de médicos especializados el último lugar, con 1,62 por 1.000 habitantes, en
enfermería el último con 2,89 y en médicos de atención primaria el 13 con 0,76;
y respecto al gasto previsto en 2022, para entidades privadas se dedica
el 31,5 %. Un brutal golpe contra la Sanidad Pública y las personas.
- En Educación Pública,
entre otros muchos recortes, se han suprimido 1.381 clases en lo que va
de Legislatura, que ha provocado que USTEA y más de 20 organizaciones
políticas, sindicales y otros colectivos promuevan una Iniciativa Legislativa
Popular.
- En el PIB per
cápita se ocupa el lugar 16 con una cantidad de 17.747 €, siendo la media
nacional de 23.693 € y la primera en el Estado de 32.048 €.
- Las 7 localidades más
pobres de España están en Andalucía: las encabezan Níjar y Vícar en Almería
con 7.097 € por persona, y continúan con Los Palacios y Villafranca, Barbate,
Alhaurín el Grande, Adra e Isla Cristina, que ninguna supera los 8.300 € por
persona.
- Y el 1º puesto del ranking de barrios más pobres de España lo ocupa Sevilla, destacando El Polígono Sur, Los Pajaritos y Amate.
Las Elecciones de Andalucía pueden ser determinantes del futuro político y social en todo el Estado, y el protagonismo social en las urnas será el detonante de una catástrofe posible que siempre será atribuible, objetivamente, a las carencias pedagógicas y de entendimiento entre las mayorías sociales y quienes representan las ideologías de progreso y libertad en la vida política y en los movimientos sociales que luchan por conquistar mejores condiciones de vida en lo social y económico.
A pesar de las divergencias políticas y de entendimiento en programas y objetivos de largo plazo, se tiene que transmitir a las mayorías sociales el acuerdo necesario y confluyente de todas las candidaturas de progreso y los movimientos sociales, que el ÚNICO y mayor peligro de estas elecciones en Andalucía es que se repita el gobierno PP-C´s-Vox, con el voto mayoritario. Vamos a confiar en la campaña electoral y en las urnas el 19-J.
NI
abstención NI votos al ultra-conservadurismo PP-C´s-Vox, que recortan Derechos,
Libertad e Igualdad.
