Parece que lo de acortar
la legislatura de improvisto, se está convirtiendo en el modus operandi en
nuestra tierra. En breve tendremos nuevas elecciones autonómicas en un contexto
complejo. Conociendo algo de este y las posiciones de los partidos nos ayudará
a decidir.
Antonio Sánchez
Rodríguez
Sevilla 23 noviembre
2018
Resumen contexto actual:
El 1 de junio de 2018
una moción de confianza contra Rajoy, tras un primer semestre intenso de
movilizaciones como el de la Plataforma de Pensionistas, el 8 de marzo de la mujer, Marchas de la
Dignidad y un sin fin de mareas ‘in crescendo’ más una sentencia que confirmaba
la financiación ilegal del partido del
gobierno, gota que colma el vaso, permiten poner en la presidencia del gobierno
al PSOE de Pedro Sánchez con el apoyo de las nuevas izquierdas y los
nacionalistas. Este suceso fue un revulsivo de optimismo en la izquierda.
Pese a este último
empujón de moral y el esfuerzo realizado por la sociedad española desde el 2011
hemos de reconocer que ante la austeridad letal como solución a la crisis, se ha
respondido con la contundencia que exigía el caso desde la calle, pero, siendo algo
crítico, no ha sido suficiente la acción de los sindicatos, inaceptable la de
un PSOE que primero estableció normas para implementarla y en segundo lugar permitió
gobernar a la derecha con su abstención –hoy todos sabemos la transcendencia
que ha tenido-, ya veremos al nuevo PSOE como actúa porque hasta ahora los
presupuestos pactados con la nueva izquierda parecen paralizados. Sí ha sido
claro el apoyo de la izquierda real al gran esfuerzo de los movimientos
sociales, plataformas, mareas, marchas, etc., incluso con su presencia, pero en
lo que les compete en el ámbito político sus presiones, resistencias y apoyos no
han resultado eficaces. Esto quiere decir que las movilizaciones masivas y
continuadas pueden torcer el brazo a las élites y que en el parlamento o tienes
mayoría, sólo o con pactos, o el esfuerzo de oposición queda en posibles
noticias y declaraciones o en iniciativas cuyo recorrido termina en los archivos.
Al menos la situación
actual es lo que refleja: un resquicio de esperanza que ha supuesto una
ralentización en las movilizaciones, pero que en la práctica no han cambiado ni
los tipos de contratos, ni los salarios y la precariedad hasta la UE reclama su
fin, las demandas de las pensiones no terminan de aceptarse y tampoco mejoraron
los desahucios, los indicadores de pobreza y la desigualdad que persiste y
aumenta. No ha sido suficiente y por ello las movilizaciones, aparte de las
elecciones, tienen que seguir adelante…
Elecciones andaluzas 2D
Casi de repente
surgen las elecciones, y es que en estas fechas en Andalucía el caso de los
ERES está por resolverse y el PSOE de Susana Díaz no desea que le coja la
sentencia gobernando, por ello deja tirado a C’s como dejó a IULV-CA. Susana es
una eficaz estratega para los acuerdos políticos que corta en el momento
oportuno a sus intereses. Lo que no sabemos son las consecuencias finales, para
su partido, de estas ‘traiciones’ políticas. En cualquier caso veamos un poco
la situación de los que pueden sacar escaños.
PSOE, este partido siempre
vencedor con cada vez menos votos, ya se dio por amortizado por su
comportamiento al principio de la crisis por aceptar las órdenes de austeridad que
acabaron con la sociedad del bienestar aplicando unas medidas definidas como “el
mayor recorte del gasto social de la democracia”. No obstante el esperado sorpasso
por Podemos no se produjo. A estas fechas este partido, resuelta su lucha
interna y aprovechando la presión social -que por cierto había que frenar de
algún modo-, y la insoportable corrupción del gobierno del PP, ha vuelto a
recuperar la vida.
En nuestra tierra a
pesar de su pérdida de votos, los pactos le ha permitido para seguir gobernando,
tanto tiempo de gobierno aporta una fuerte inercia clientelar política,
económica, subsidios y ayudas, pero quiero
dejar dicho con claridad que por más que se aluda este asunto para Andalucía, no
es diferente al clientelismo de aquellos partidos que llevan el mismo tiempo
gobernando, en otras comunidades, véanse los casos de los nacionalistas
catalanes o del PNV en el país vasco, e incluso en otras comunidades.
En cuanto a los
últimos actos del PSOE estatal de carácter progresista con apoyo de Unidos
Podemos quizás le terminen favoreciendo al PSOE de Susana Díaz, pese a tratar
como trató a Pedro Sánchez en su día. Salvo situaciones de última hora.
PP, este partido esta
noqueado, sus luchas internas son cada vez más públicas y ya no debe
representar la derecha que guste a las élites. Estas parecen haberla amortizado
y apostado por una nueva. Por ello, además de su temor al sorpasso de C’s, su labor política está dislocada y
vuelto agresiva encabezada por su nuevo presidente Pablo casado y enfocan su actividad a la
búsqueda de problemas personales de sus adversarios y atacar olvidándose de su
función política… Por otra parte, aquí se enfrenta más a la nueva derecha que a
sus adversarios naturales, pero probablemente sus objetivos comunes les
obliguen a pactar.
Sólo que esta actitud
tendrá un doble coste: que se consolide el posible sorpasso de C’s y el fortalecimiento
de Vox. Para colmo de males el único
paso dado en base a mostrar cierta responsabilidad de estado con la renovación
de los vocales del CGPJ se lo han cargado con mensajes de WS de que sacarían
provecho político de los cambios.
CIUDADANOS, este partido en
Andalucía es una auténtica franquicia política que no tiene nada que decir por
sí misma. Es un producto virtual de frase corta e imagen rápida, adaptado a las
redes sociales… nada de compromisos para asalariados y mucho apoyo aparente, a
emprendedores, autónomos y falsos autónomos porque sabe que este sector de la
población es numerosa y por razones culturales se han desprendido de su
verdadera clase social y dan por supuesto que las ventajas a las empresas les
llegará a ellos, cuando su subsistencia depende básicamente de sus pocos
trabajadores.
En cuanto a su pacto en
esta última legislatura con el PSOE, ambos partidos se han servido el uno del
otro. Al PSOE de Susana le dio la vida y C’s vendía la imagen de un partido de “Centro
Político”. Un partido que negocia con la derecha o con la izquierda para dar
“estabilidad al estado”, porque al tiempo que se asociaba al PSOE en Andalucía
lo hacía con el PP de Cifuentes en Madrid.
De todas formas
Susana con leyes de menos calado ha hecho con C’s lo que hizo con IULV-CA en la
anterior legislatura… primero saca las leyes más neutras. Y las de más
repercusión, como por ejemplo la Reforma Electoral las obvia provocando el
desencuentro. Es la segunda vez que evita esta ley.
De todas formas esta
franquicia, al menos, aquí en Andalucía ganará votos por los errores de los
demás y no por méritos propios. Se saben como la fuerza más probable para
volver a pactar con el PSOE de Andalucía, no les importaría porque conocen el
encono de IULV-CA y Podemos con el PSOE de Susana, pero eso será sólo si no
pueden conseguir mayoría absoluta con el PP, al que ya andan tirando los tejos
al tiempo de atacarle (personalidad múltiple).
IULV-CA, como experiencia
anterior. Si fuese por ella misma creo que se mantendría tan alejada del PSOE
como en esta legislatura, porque la tomadura de pelo de la anterior fue de
nota. De las leyes más importantes negociadas y exigidas por su parte, todas a
la basura… Cuando IULV-CA se percató de la estratagema de Susana de alargar el
trabajo de las comisiones para que no diese tiempo a sacarlas, amenazó con un
referéndum a sus bases para terminar con el pacto y dicho esto, Susana hace el
paripé de enfado y cierra el negocio del pacto ipso facto. Así, sólo sacaron
adelante lo de casi siempre del PSOE leyes sociales de escasa o nula inversión
económica como:
·
la
Ley de Transexualidad y
·
la
Ley de Transparencia.
Pero quedaron otras
tan importantes como:
·
El
de la banca pública que llegó a
presentar las conclusiones finales.
·
Ley de la Función Social de la Vivienda
·
Ley Integral de la Agricultura, pieza clave en la
comunidad autónoma.
·
La renta básica, quedo avanzada y con posibilidad de salir adelante.
·
El
de la Memoria Histórica
·
El
de Protección de los consumidores de
productos hipotecarios,
·
El
de la reforma electoral (Tampoco
lo ha conseguido C’s).
·
La
de garantizar los mínimos vitales de
luz y agua para familias sin recursos
·
Una
reedición de la concertación social,
que expiró el 31/12/2013.
·
Y
quedó por renovar el Consejo de
Administración de la Radio Televisión de Andalucía (RTVA), cuyo mandato
caducó en mayo de 2014.
Y algunas más…
ADELANTE ANDALUCÍA, es la versión de
Unidos Podemos, con la presencia de Izquierda Andalucista y Primavera Andaluza,
también en su momento EQUO pero abandonó la coalición a última hora. Una pena.
Por una parte ha de
ser bienvenida la unión de esa izquierda real que cubrirá el verde de EQUO con
los contenidos propios de sus programas –los mismos que han subido en Alemania-
y que a estas fechas no pueden obviarse de ninguna de las maneras. Por otra, puede
resultar práctica aunque sea a efectos de contaje -ley D’hondt-, aunque en
política 1+1 no es siempre es igual a 2.
La coalición no debe
perderse en detalles, porque los puntos básicos como resolución del conflicto empresa-trabajo en equilibrio y equidad, unos potentes servicios público con gestión pública, la solidaridad, colaboración y la libertad se expandirán en el resto, pero
evidentemente hoy también deben ocupar las primeras filas el problema
ecológico, el respeto al medio ambiente, las energías renovables, etc. porque
no acaban de arrancar dado el potente freno de los intereses de los productores
de petróleo, de energía nuclear, etc.
la historia de
Podemos es corta pero intensa y con deseos profundos de transformación social, estas
elecciones le supondrán la superación o no de los errores cometidos por su inexperiencia
en la escena política o al dudar en mostrarse con claridad su ideología o en
ubicarse en la equidistancia –ojo no sólo en el asunto territorial- también para
ganar la transversalidad con un discurso académico sobre el referente vacío, que
buena parte de la sociedad no acababa de entender o de las diferencias internas
excesivamente públicas.
Es importante
destacar que Podemos Andalucía aporta un trasfondo nacionalista inclusivo potenciado
por Teresa Rodríguez (IA) que defiende un ideal andaluz desde allá por el 2006
(no es nuevo), posiblemente tomado de José Luis Serrano Moreno, catedrático de la
universidad de Granada que militó desde 1977 a 1979 en el PSA, un nacionalismo
de izquierda que repuntó con fuerza, pero que derivó hacia el centro derecha
como PA y siguió en esa dirección hasta desaparecer. Un nacionalismo aceptado
por todos los componentes de la coalición.
La historia de otros
más viejos como los de IULV-CA muestra deseos de cambio que con el tiempo se
fueron suavizando y adaptándose al sistema, incluido el parlamentario, se atascaron
en la burocracia legislativa que los alejaba cada día más de la calle… pero en
últimas instancias también se vió influenciada por el movimiento del 15M que forzó la
corrección de la deriva de este grupo de partidos para terminar confluyendo con los
movimientos surgidos del mencionado movimiento, no había otra alternativa mejor.
La historia de los
dos partidos nacionalistas es posible que procedan de la desaparición del PA o
incluso antes de ello por centrarse en una vía a la izquierda andalucista.
Tal vez sea
‘oportuno’ electoralmente hablando revestir de nacionalismo esta coalición,
como otro aglutinante además a los ya existentes de la izquierda. Quizás sea
oportuno como lo fue en los finales de los 70 cuando el pueblo andaluz siempre
inclusivo -fuese o no fuese nacionalista- no permitió que lo intentaran dejar
en la segunda fila. Oportuno quizás en estos momentos en los que el problema territorial
generado en Cataluña está candente y pueda motivar al pueblo andaluz a tomar
las riendas de su tierra desde una izquierda inclusiva y ejemplar.
Confieso que no soy
partidario de nacionalismos, más allá de los que surgen contra invasiones imperialistas
y colonialistas, incluso me parece una contradicción unir izquierda y
nacionalismo. Temo que al igual que en Cataluña, el discurso, los objetivos y
las prioridades se confundan y se centren sólo en ‘lo nuestro’ olvidando a los
demás pueblos de este país y del mundo, pero aún estando en esa nueva nación se
olvida incluso, hablar en lo que hacer al día siguiente de ser una nación
independiente, sin conocer el programa
social que se implantaría o cómo se atenderían las reivindicaciones de la clase
asalariada: ¿Subiría al día siguiente el salario mínimo a 2.000 euros?, ¿Se
sentarían los trabajadores en los consejos de administración de las empresas? ¿Se
establecería el pleno empleo? ¿Se restablecería de inmediato la Banca Pública?
¿Se nacionalizarían las empresas estratégicas para la nueva nación?.
Este riesgo han
corrido las izquierdas como la CUP y los comunes en un camino con extraños
compañeros de viaje, que al final les ha costado desprenderse de ellos y de
marcar las diferencias. El resultado ha sido confuso para partidos y población.
No obstante esta coalición de izquierda nacionalista inclusiva -debe explicar con detalle estos conceptos- es también transformadora, ecologistas,
defensora de la igualdad de género se debe centrar en
prioridades claras, entendibles y coincidentes con las exigencias de la
gente para que pueda obtener una representación más importante que la
actual.
VOX, lo que ocurre en
otras naciones puede ocurrir en la nuestra y está ocurriendo. En Sevilla hace
unas semanas se constituyó este partido y en su acto primero asistieron 600
personas y al poco reunió más de 3.000 también
en esta ciudad. Sobre este grupo es necesario advertir a aquellos
sectores desinformados del mundo del trabajo, que sorprendentemente terminan apoyándolos,
que deben conocer las diferencias de sus propuestas con las del resto de
partidos… No olvidemos que el fascismo vende como objetivos la soberanía del
país, un concepto patrio excluyente, pero también se muestra como contrario al
capitalismo y al mercado, desea una banca pública controlada y dice ponerse nervioso con las
potentísimas multinacionales extranjeras… quieren su cortijo sólo para ellos.
No hay que obviarlos, sobre todo pensando en el futuro, y quizás la mejor manera
sea definir clara y exquisitamente los contornos y perfiles de esos y otros objetivos
para que esa clase trabajadora mal informada y formada, distinga las grandes diferencias
en palabras similares.
Finalmente, hay que terminar
optando por una de las opciones. Creo que fue el Juan de Mairena de Machado el
que dijo cuando tengas dudas para elegir una opción política elige la que esté
más cercana al pueblo.