Juan Manuel Valencia Rodríguez. Ateneo Republicano de Andalucía.
13 de
junio de 2023
Concluyó con éxito (aunque con bastante más polémica pública de lo deseable) la coalición de izquierda en SUMAR de cara a las elecciones generales del próximo 23 de julio, con la sola excepción de Adelante Andalucía (decisión inexplicable para mi criterio, e incongruente al anunciar que sólo se presentará en Cádiz, para no dividir el voto de izquierda en las demás provincias: ¿y por qué en Cádiz hay que dividirlo? Para eso, ¿no hubiera sido más razonable unirse a SUMAR y negociar sus puestos en las candidaturas andaluzas? Si de lo que se trata para Adelante es de amparar los intereses de Andalucía, ¿cómo va a hacerlo marginándose de la única opción electoral que puede asumir ese objetivo y defenderlo con su presencia en las instituciones?).
Hay razones poderosas para que la izquierda se presente unida y trate de conseguir un apoyo amplio en la ciudadanía. Revalidar el gobierno progresista de coalición con el PSOE e impedir el acceso al poder de la derecha aliada a la ultraderecha no es poca cosa en los tiempos que corren, ni fácil. La mayoría social se verá perjudicada si no se consigue, vendrán tiempos de regresión en todos los ámbitos. Y lograr el máximo de diputados posible para SUMAR es la condición imprescindible para tener poder suficiente para forzar una política decididamente progresista. No tenemos mejor opción.
Se trata de unirse en torno
a objetivos que reviertan el aumento de la desigualdad social y mejoren la vida
de las personas, del común, y las condiciones del planeta en que vivimos. Esto
a mi modo de ver gira en torno a cuatro núcleos esenciales: la defensa de lo público, la defensa de
los derechos y libertades, la
defensa de la Naturaleza y la
defensa de la paz y del no
alineamiento internacional.
De un gobierno de
derecha/ultraderecha la evidencia práctica nos muestra lo que vendría: reforzar
la privatización de la sanidad pública y de la enseñanza pública, seguir
agravando la degradación del planeta, recortar los derechos de las mujeres y
las libertades públicas, favorecer la congelación de salarios y pensiones,
acabar con los importantes logros en Memoria Democrática…
El gobierno de coalición
anterior hizo cosas mal, y hubo otras que no hizo y pudo y debió hacer. Pero
sólo con ese gobierno, que tuvo que desenvolverse en las peores condiciones
imaginables (rebrote de la crisis económica, pandemia universal, guerra y
carestía, auge de la ultraderecha en todo el mundo…) se emprendieron políticas
sociales eficaces que han beneficiado a la mayoría de la población, mediante
una intervención pública para intentar disminuir las desigualdades: preservar
muchos puestos de trabajo en medio de las múltiples crisis, mejorar la calidad
del empleo, proteger las pensiones, incrementar el Salario Mínimo, atenuar la
precariedad con el Ingreso Mínimo Vital… Ha habido logros incluso en el terreno
en que más propaganda difunde la derecha/ultraderecha: se ha logrado desactivar
el conflicto catalán y una parte del espacio independentista se ha comprometido
con su constante apoyo parlamentario en esas políticas sociales públicas.
Conseguida la unidad
electoral, hay que generar esperanza,
trabajar por ilusionar a la ciudadanía para dar continuidad a las políticas
sociales progresistas consiguiendo buenos resultados para SUMAR el 23 de julio.
Trabajar para las
elecciones, pero también para empezar a construir
desde abajo una base sólida que genere unidad y poder popular real. Y eso
no es tarea sólo de los dirigentes políticos de izquierda, requiere
ineludiblemente la participación de la sociedad civil, de todos los que quieran
implicarse en ello. Plasmar en cada pueblo y comarca un programa cercano de
transformación social discutido y acordado entre todos, y en torno a él
construir la unidad organizada. SUMAR
ha de erigirse como un movimiento
sociopolítico al que ha de dar vida la gente y se encarne en la gente,
diverso y plural pero unido, democrático, horizontal, descentralizado, federal.
Que recoja, asuma e impulse los objetivos sociales de cada zona y los de
carácter general. Y que trabaje a medio plazo por un país diferente, que entre
todos hemos de definir.
