Sin duda alguna el panorama político español hoy, a once meses vista de la moción de censura y toma del control del gobierno por el PSOE con el apoyo de la izquierda y nacionalistas, pese a las esperanzas surgidas, a fecha de hoy no es nada halagüeño. En los últimos cuatro meses varios nubarrones políticos se han producido en la península incorporándose a los ya clásicos: Crisis 2008, 15M o el asunto territorial en el 2012. Todo ello, aumenta aún más la incertidumbre sobre el futuro del país después del 28 de abril.
Antonio Sánchez
Rodríguez
2
de abril de 2019
Antecedentes:
Antecedentes:
Las fuerzas que cambiaron el gobierno y apoyaron al
PSOE de Pedro Sánchez el 1 de junio de 2018 se comprometieron a implantar medidas
que revirtieran el inmenso daño social y político impuesto por la derecha
corrupta del PP y con anterioridad un caduco PSOE; ambos partidos sumisos a las
élites obedecieron sus órdenes y se mostraron insensibles ante los sufrimientos
de la mayoría social y la pérdida de
derechos de la ciudadanía.
Si era previsible o no su actuación de gobierno ya
se comentó desde este blog, y francamente: si no hubiese sido por las presiones de la
izquierda transformadora e incluso por parte de los nacionalistas no se
hubiesen sacado adelante asuntos que, si no cumplían al 100% la demanda social,
al menos atendía en parte: las potentes movilizaciones de mujeres,
pensionistas, jóvenes, estudiantes, trabajadores en sus marchas por la dignidad,
parados, etc. con las siguientes medidas:
·
la subida del salario mínimo interprofesional,
·
la revalorización de las pensiones con el IPC,
·
el plan de empleo juvenil,
·
la ley de igualdad de trato y oportunidades entre hombres y mujeres,
·
las ocho semanas de permiso de paternidad o
·
la eliminación del copago farmacéutico para familias con renta baja e hijos
a su cargo.
·
bono social energético para familias sin recursos,
·
medidas
de conciliación laboral y familiar,
·
mejora en
las becas y reducción de tasas
universitarias y
·
la
recuperación de la prestación de desempleo para mayores de 52 años, entre otros.
El modelo de coalición (Unidos Podemos, ERC, PNV,
PDeCAT, Compromís, Bildu y Nueva Canarias), aunque forzado por la insostenible
presencia de un gobierno acosado por la corrupción, era una vía posible de
lo que las fuerzas progresistas de la izquierda, nacionalistas e
independentistas de izquierda e incluso el PDeCAT, incluso con un frágil acuerdo de mínimos, son capaces de hacer.
También es cierto que han quedado pendientes compromisos
de urgencia como la derogación de la ley Mordaza o de las Reformas
laborales que bien claro dijo la ministra de trabajo que como mucho se
estudiaría un retoque de la Reforma laboral de Rajoy, pero ni una palabra sobre
la de Zapatero. De igual manera ha habido por parte del gobierno casos de vaivenes
inexplicables como las tomadas sobre la inmigración: de ayudar al Aquarius a dejar
barcos atracados; el mantenimiento de la venta de armas a Arabia Saudita para
la guerra del Yemen o el reconocimiento del autoproclamado presidente de
Venezuela, etc.
Presupuestos
Generales del Estado (PGE) para 2019, la ruptura:
Pero los PGE para 2019 era otra barrera a superar y
aunque con partidas importantes de carácter social conseguidas en negociaciones
con Unidos Podemos e incluso con el PNV e incluso atendiendo exigencias del
Estatut catalán como elevar las inversiones en Cataluña hasta el 18% (un 5% más
de lo proyectado) han sido rechazados en el parlamento y si tenía algún sentido
la negativa de la burguesía catalana no tiene ninguna justificación la de
Esquerra Republicana que finalmente parece mostrar claramente su prioridad más
independentista que de izquierdas.
La propuesta de los PGE ha provocado importantes discrepancias
en el bloque soberanista e independentista con buena parte de ellos dispuestos
a mantener la coalición de la Moción de censura que les permitiría atender la
agenda social ante la secesión y optar por terminar la legislatura. La otra
opción que motivaría el NO era provocar unas nuevas elecciones generales y
hacer notar su fuerza –estando en España- pero queriendo dejarla, y todo a
sabiendas de que los resultados de las elecciones andaluzas pueden reproducirse
en el Estado con un gobierno de las tres derechas.
Parecía de una lógica aplastante para los partidos
catalanistas, que se denominan de izquierdas, atender, de una vez, a los asalariados
catalanes en sus problemas diarios de empleo, vivienda, servicios públicos,
etc. en los que nunca se habían entretenido en esta movida secesionista que
nunca explicó cómo sería el día siguiente
de la DUI. Este sector cuya prioridad no es sino la independencia y “mañana ya
veremos”, se ha centrado en ese futuro simbólico poniendo el foco en el
Process, la libertad de los presos, reducción de delitos y su práctica
anulación, evidentemente asunto importante para la Democracia y evidentemente
para toda la izquierda progresista, pero no es óbice para la salida de los PGE,
salvo que la idea real que persigan sea aquella de “cuando peor mejor” o sea
una potenciación de un nacionalismo español de grado máximo que daría sentido y
justificaría el suyo propio, manteniendo de esta manera la estrategia del
nacionalismo de la burguesía catalana.
Estos son los antecedentes inmediatos, pero la trayectoria
no es tan corta, tampoco se olvida que nuestro país está inmerso y soporta las tensiones
e influencias del resto del mundo, pero no se trata de hacer un relato más
complejo aún que el de nuestro propio “patio”, dando por asumida toda relación bilateral
con el exterior y su influencia, pero la cuestión es:
¿A
qué situación hemos llegado a esta fecha previa a las EEGG ?
Aunque sea sólo para introducir y a título de
recuerdo hay que nombrar tres sucesos que cristalizaron en un corto período de
tiempo de nuestra historia: la crisis del 2008, el 15M del 2011 y la Diada del
2012 a los que se han añadido otros que lo han
hecho hace apenas unos meses y que veremos en una segunda parte del artículo. A partir de estos
actos España comienza a ser otra cosa en todos los niveles. Nuestro país inicia
un cambio en su historia no menos importante que el de Europa terminada la II
Guerra mundial o el final de los años 70 en nuestro país, sin olvidar que el
paso del tiempo en la historia no significa siempre un avance o un progreso
positivo, a veces hay retrocesos como los actuales que demandan la máxima
atención social y política para la recuperación.
En los dos primeros nos entretendremos poco porque
por ejemplo el primer suceso, la magna crisis de 2008, poco hay que
añadir a todo lo escrito y publicado sobre él, más allá de ser un punto de
partida. En cuanto al 15M guste a unos más y a otros menos hay que
insistir que marcó nuevas metas y modos para llegar a ellas; el tiempo para
conseguirlas reside en el compromiso de confluencia que las fuerzas
progresistas obtengan, pero el futuro o el camino a seguir están marcados
inexorablemente, las derechas harán lo indecible por evitarlo.
El tercer suceso sí que requiere espacial
atención por la especial incidencia que ha tenido en estos pocos años e incluso
como por si mismo ha podido llevarnos o no a estas elecciones. La Diada de septiembre
del 2012 fue la eclosión del problema territorial que, como los ojos del
Guadiana, salen a la luz en determinados momentos de la historia que nunca coinciden
con épocas de bonanza y por tanto, a mi modo de ver, nunca están exentos de victimismo
y oportunismo. En este caso ha sido clave para abrir nuevamente el debate de la
“independencia” o sea el “caso catalán” tal y como ya se trataba en la
república de 1931 entre Azaña y Ortega y Gasset como diputados. Pero también al
respecto hay que decir antes que nada tres cosas:
·
Una no confundir los intereses de las élites de
poder nacionalistas, con los de los pueblos afectados.
·
La segunda que toda institución que depende del
Estado o Comunidad trabaja para dicho Estado o Comunidad.
·
Y la tercera como una consecuencia de la anterior:
las culturas dominantes las imponen las ideologías dominantes.
La Diada del 2012
respondía al rechazo del Estatut del Tribunal Constitucional en 2010, al
déficit catalán respecto a España o… ayudaría a desviar la atención de los
casos de corrupción de CiU?
Dicho lo anterior hay que preguntarse de manera más concreta por las causas que motiva el cambio de un nacionalismo unionista al independentismo en Cataluña que surge en el 2012, otra lectura es que la dialéctica derecha-izquierda ha sido transformada interesadamente a la dialéctica nacionalista comentado independentista-unionista. si bien estos aires surgen también en Europa a nivel de estados como el Brexit, que “desean salir, pero como si no se fuesen”. De los británicos no hay que olvidar su exigencia -en nombre de su “solidaridad”- de la devolución del dinero que superara su aportación a la Comunidad Europea frente al que pudiese percibir de la misma… De ahí el “Cheque Inglés”.
Dicha postura no está muy lejos de lo que argumenta
Cataluña para respaldar su Catal_exit… Por ejemplo (subrayo las fechas) en junio
de 2012 en el canal en español de la CNN Mas decía que Cataluña tenía un
déficit fiscal con España de 20.000 mill. de dólares anuales y que de no ser
así en dos o tres años liquidarían su deuda. Del mismo modo Oriol Junqueras
también en diciembre de 2012 en la emisora catalana RAC1 hablaba de que
con la independencia tendrían 16.000 mill. de euros más cada año o sea cuatro
veces más que todos los recortes que hace la Generalitat.
La cifra
pertenece al informe de la Generalitat “Resultats de la balança fiscal de Catalunya
amb el sector públic central 2006-2009”, de marzo de 2012, que según la Generalitat, es el déficit fiscal que
tuvo Cataluña con el Estado en 2009.
Para desmontar la noticia dos catalanes: Josep
Borrell y Joan Llorach repasaron el Informe y publicaron dos artículos en enero
de 2014 en El país como adelanto de un libro publicado en 2015 “Las cuentas y
los cuentos de la independencia”. Para los autores los supuestos económicos, la
ausencia de conceptos a tener en cuenta, etc. no hacían posible ni acercarse a
la cifra ni de lejos. ¿La noticia se hubiese hoy calificado como una Fake
News?.
Pero lo más importante ¿En qué momento lanzan estos
datos respecto a la fecha de la Diada?. Pues Arthur Mas lo hace en junio, un
mes después de que los medios publicaran en mayo del 2012: “Todos los casos de corrupción catalanes apuntan a CiU” y justo algo más de dos meses antes de la Diada 2012 y Junqueras tres meses
más tarde de dicha Diada.
Por delante, hay en
el 2005, Maragall sacaba a relucir en el Parlament de Cataluña el
sistemático 3% de mordida a las empresas, en junio del 2010 El rechazo
de 14 artículos del estatut por el Tribunal Cosntitucional y poco más tarde de
la Diada en el 2014 el “Honorable” Pujol dejó de serlo, si bien ya en
1986 estuvo en entredicho en el caso Banca Catalana..
Pero todos los casos de corrupción que surgían en
cadena no arredraron al gobierno catalán porque ya en el 2007 se
iniciaron actuaciones del caso Gürtell que la fiscalía lo denuncia ante la
Audiencia Nacional como red de corrupción política asociada al PP, los casos de
corrupción y de financiación del partido fluyen con rapidez entre Valencia y
Madrid dejando cada vez más tocado políticamente al Partido Popular. Nada más
oportuno que aparezcan esteladas para sacar las roja y gualda y llenar los
balcones de una y otra villa de banderas y lazos para tapar todo el desperdicio
de dos élites que tantas veces han llegado a acuerdos como a peleas por trozos
de poder.
Lo cierto es que ante los PGE el catalanismo ha mantenido
el Catal_exit como prioridad y por encima de todo y lo cierto también es que está
teniendo una gran incidencia en el devenir de este país y provocado que las
fuerzas de la ultraderecha tenga eco entre grupos de la ciudadanía..
Pero en su propio desarrollo también están haciendo
visibles las posiciones de las fuerzas
políticas catalanas tanto de las derechas como de las izquierdas. De ese modo
vemos que los rivales políticos en el juego político derecha-izquierda CiU y
Ezquerra hoy se unen para abrir nuevos caminos a Cataluña, sin olvidar que ERC
formó parte del Tripartito (ERC, PSC, ICV). Por otra parte la CUP
anticapitalista ha estado pendiente del movimiento de carácter transversal al entrar
conservadores, socialdemócratas y anticapitalistas, probablemente en la idea de
si España no cambiaba en nada sus posturas de austeridad y recortes la vía de
crear un nuevo país fuese una alternativa viable. Del mismo modo tampoco acabó
de recuperar un electorado de clase obrera y de origen emigrante la coalición de Catalunya Si que Es
Pot, formada por la histórica ICV y por el joven partido de Podemos que era
visto como el arma electoral del 15M.
Estos comportamientos deben ser correctamente
interpretados y valorados desde las fuerzas progresistas que hasta ahora se han
posicionado con no pocos complejos pese a los esfuerzos sinceros de
reconducirlos hacia la dicotomía
izquierda-derecha, aunque intentado esto con mayor o menor intensidad y claridad
no parece haber sido entendido o siéndolo no ha interesado.
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