Francisco
Casero Rodríguez
30 de
septiembre de 2025
“La Ganadería Extensiva tiene
más valor por la función medioambiental que desarrolla en la conservación de
ecosistemas que como proveedor de alimentos”.
Desde hace años la Fundación Savia venimos insistiendo en esto, que toma más importancia ante la ola de incendios forestales verano tras verano con consecuencias muy graves…. donde la Ganadería Extensiva tiene mucho que aportar.
Comparto la aportación de
Fundación Savia a la Propuesta de la Junta de Andalucía de la Estrategia
Andaluza de la Ganadería Extensiva, en la que dejamos claro nuestra posición de
lo que debe de recoger la Estrategia para que sea coherente con la grave
situación que vivimos con nuestros montes y el despoblamiento:
De acuerdo con la Resolución 8
de julio de 2025 de la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo
Rural, desde la Fundación Savia pasamos a remitirle nuestras observaciones y
aportaciones a la Propuesta Inicial de la Primera Estrategia Andaluza de la
Ganadería Extensiva.
En primer lugar, queremos felicitar a la Junta
de Andalucía por tomar decisión tan necesaria para nuestro territorio, y tan
importante para el futuro de la Ganadería Extensiva y su integración en las
medidas de conservación medioambiental de los abundantes ecosistemas existentes
en nuestra Red de Parques Naturales (Red Natura 2000).
En segundo lugar, deseamos poner de manifiesto
nuestro reconocimiento al gran esfuerzo realizado por los autores del texto de
esta propuesta (con más de 400 folios de contenido), y a todo el personal que
ha participado en el desarrollo del modelo de gobernanza que ha servido para
elaborar este borrador de Estrategia Andaluza. Un ejemplo de participación a
nivel interno, por todos los Órganos y Consejerías, bajo la responsabilidad y
promoción de la CAPADR y de todos sus centros directivos.
En cuanto al modelo de
gobernanza externa que ha servido para propiciar las aportaciones de los
agentes del sector, con todo el respeto a los participantes, nos surgen dudas
sobre si siempre han estado presentes todos los problemas que arrastran las
explotaciones de aquellos ganaderos pequeños que no pueden acudir a estas
reuniones por incompatibilidad de horarios con su trabajo diario, prácticamente
de actividad ininterrumpida durante las 12-14 primeras horas del día.
De todas formas, partiendo de la base de que
reconocemos que el texto y contenido de esta Propuesta Inicial de Estrategia
Andaluza para la Ganadería Extensiva se ha hecho por parte de todos los
interesados con la mejor intención posible, para crear conciencia de la
problemática existente en este sector para poder después actuar decidida y
rápidamente en su necesaria solución; desde nuestra Fundación queremos aportar
ideas, fundamentos y datos, con el máximo respeto y consideración a todo el
trabajo desarrollado aunque desafortunadamente no coincida con lo incluido en
la redacción de este primer texto-borrador.
Nuestra Idea Básica se sustenta en que el
ganado en extensivo tiene mucho más valor por la función medioambiental que
desarrolla en el mantenimiento y conservación de ecosistemas (función
principal) que por la función que realiza como proveedor de alimentos de alta
calidad para la población (función secundaria). Idea que venimos defendiendo en
los informes que hemos elaborado para la Administración, y los eventos y foros
a los que se nos invita, desde hace décadas, coincidiendo con el momento en que
la FAO (Steinfeld et al, 2006) recomienda la orientación del pastoreo en
extensivo hacia la prestación de Servicios Medioambientales (paisaje,
biodiversidad, conservación de ecosistemas, lucha contra el fuego, etc…) de tal
modo que la producción ganadera sea un producto secundario y los Servicios
Medioambientales sean el producto primario.
En este contexto, comenzamos a exponer nuestra
discrepancia con la propuesta porque creemos que desde las primeras páginas de
esta Estrategia se empieza a orientarla sobre un pilar equivocado, que es la
búsqueda de mayor rentabilidad de las explotaciones ganaderas extensivas a
través de su incremento de competitividad mediante la revalorización
cualitativa de los productos alimenticios (especialmente carne) que se obtiene
de los animales que pastorean. Esa es por lo menos la impresión que se obtiene
cuando se empieza a leer las primeras páginas, como, por ejemplo:
§ En la
página 12 cuando en el punto 2.3.6.1 se alinea y encuadra dentro de que el
objetivo general a nivel regional debe ser “la mejora de la competitividad de
la agroindustria de Andalucía” o…
§ En la
página 16, en el punto 4.1 cuando se dice que “la misión de la Ganadería
Extensiva debe ser una actividad competitiva, sostenible y valorada por la
sociedad”, anteponiendo la producción de alimentos de calidad (valorados
económicamente en el mercado) sobre los beneficios ambientales que aporta (sin
valoración económica) o…
§ En la
misma página 16 en el punto 4.2, cuando dentro del apartado Visión, se dice la
frase: “Mejorar la competitividad de la Ganadería Extensiva en Andalucía”
cuando desde nuestro punto de vista vendría mejor una que dijera: “Mejorar los
Servicios Públicos que presta la Ganadería Extensiva Andaluza a la sociedad” o…
§ En la
misma página en el punto 4.3., cuando se dice dentro de los valores
estratégicos: “Hacer de la Ganadería Extensiva una actividad económica
competitiva”, que nosotros sustituiríamos por lo siguiente: “Hacer de la
Ganadería Extensiva una actividad social, viable y sostenible”…
§ En la
página 20 es donde se empieza a centrar el grueso de nuestra alegación, ya que
en el punto 6.1., Definición de Ganadería Extensiva, se reconoce que no existe
en España una definición legal, formalmente reconocida, que caracterice a la Ganadería
Extensiva.
Precisamente por eso se
debería hacer un gran esfuerzo para buscar una definición capaz de dar un giro
potente e innovador a esta Primera Estrategia Andaluza de la Ganadería
Extensiva, y creemos sinceramente que es el momento apropiado para hacer una
Definición Moderna e Innovadora, que sea pionera en España…, con lo que se
evitaría el agobio burocrático de tener que dedicar 5 páginas de este borrador
de Estrategia (págs 20-25) a reflejar distintas y variadas normativas de tipo
fiscal, de Actividades Económicas, de Aplicación de Nitratos, de Aplicación del
PDR, del PEPAC y variados Estudios del MAPA, etc, etc..., en los que tras el
gran esfuerzo realizado se observa que todas ellas son incompletas, no
coincidentes, e incluso con menciones a ciertas cargas ganaderas bastante
preocupantes por su incidencia negativa sobre los distintos factores reflejados
en el medio ambiente.
§ Creemos
honestamente que en base a estas circunstancias y aun reconociendo el esfuerzo
realizado por el equipo redactor, no se puede hacer una clasificación fiable de
ganaderías extensivas andaluzas como la que se presenta en este borrador. Por
ello proponemos un tipo de definición más concreta y clara, como podría ser la
siguiente modificación sobre la expuesta en el texto:
“La Ganadería Extensiva es aquella que al
menos el 60 % de la Materia Seca (MS) de su alimentación la obtienen mediante
el pastoreo aprovechando los recursos del territorio (naturales y cultivados)
ajustándose a su disponibilidad espacial y temporal (al menos durante 7-8 meses
de estancia en el campo) con unas cargas ganaderas ajustadas que respeten el
medio ambiente, usando razas adecuadas y adaptadas”.
La definición de la que parte la Estrategia
deja la puerta abierta a distintas formas de hacer ganadería extensiva o
semiextensiva sin serlo, por ejemplo: ¿podría interpretar alguien con esta
definición, que un ganadero de extensivo podría sea también aquel que a lo
largo del año alimenta a su ganado en pesebre con forraje que produce en su
explotación durante cortos periodos de tiempo?
En la página 25, en el punto
6.2., Recursos Pascícolas, hace mención a lo importante que son los pastos como
soporte de la alimentación del ganado que vive en ellos.
Pero desde nuestro punto de vista se debería
poner mayor énfasis a la hora de valorar económicamente esos pastos como
alimento del ganado, ya que puede suponer una riqueza económica superior a la
cosecha conjunta de todos los cereales (trigo, cebada, avena, maíz, sorgo,
etc., etc.) que se producen en Andalucía…, y que por supuesto si no se
aprovechan por el ganado se pierde ese valor, de centenares de millones de
euros, y lo que es mucho peor, se transforma en material combustible que
después arde y que los bomberos de la Administración tienen que apagar a razón
de unos 10.000 euros por hectárea (sin valorar el coste de los medios aéreos),
más los costos adicionales del daño material provocado por contaminación del
medio, y sin querer entrar en los daños irreparables en vidas humanas y
perdidas sentimentales de las personas afectadas.
En la tabla 1 de la página 30 se explicitan
los más de dos millones de hectáreas (2.098.000 hectáreas) de superficie
pastoreable que hay en Andalucía (SIGPAG. CSP). ¿Cuánto valen esos Pastos?
Porque está muy bien que se describan, pero lo interesante también es que se
valoren.
Según el gráfico 1 de la página 48, el 34 % de
la superficie de la Comunidad Autónoma son PASTOS (más terreno que el dedicado
al olivar la tierra arable), es interesante reseñar que se hace una descripción
y distribución bastante completa de los diferentes tipos de pasto que hay en
Andalucía..
a)
¿Pero cuántos se aprovechan por el ganado?
b)
¿Cuántos se desperdician?
c)
¿Cuántos arden?
d)
¿Qué significa económicamente ello para
Andalucía?
En la página 54 se encuentra
el punto 6.2.4., La Ganadería Extensiva y el terreno Forestal, donde queda
claro que ahí están introducidos todos los pastos forestales… Pero quedan
excluidos todos los Pastos procedentes de cultivos agrícolas.
En la página 56, en el punto
6.3., Principales Sistemas Ganaderos Extensivos de Andalucía, queda claro que
el 71 % de las explotaciones ganaderas son de una sola especie y el 29 %
restante son de varias especies. Los datos merecen la pena ser revisados porque
chocan un poco cuando el punto 6.3.1. se dedica específicamente a “Las Dehesas”,
que suponen 1.717.817 hectáreas, y cuando se hace mención específicamente al
ganado existente en la Dehesa, se dice que lo que más hay es ovino-caprino
(1.038.814 reproductoras ovinas + 127.390 reproductoras caprinas), pero se debe
mencionar que la carga ganadera media es mayor por parte del ganado bovino (177.847
hembras reproductoras de bovino + 25.771 reproductoras de lidia) con lo que
ello supone.
En la página 58 se hace una
definición de la Dehesa de acuerdo con la Ley 7/2010 que no compartimos, al
igual que nos ocurrió en su día con el conjunto de esta Ley, obsoleta e
inservible para los objetivos que se marcaron. La prueba fehaciente es el nulo
uso que se ha hecho de ella y la gravísima situación en la que se encuentra la
Dehesa hoy día.
No comprendemos el
empecinamiento que existe a nivel nacional para ‘definir y redefinir´ la Dehesa
una y otra vez, cuando la Dehesa está perfectamente definida por los mejores y
más acreditados investigadores de nuestro país en el Nomenclátor Básico de la
Sociedad Española para el Estudio de los Pastos (2021), al que se ha recurrido
con anterioridad y se ha hecho referencia ya en este mismo borrador (página
25).
En el punto 6.3.5 de la página
78 se hace un pormenorizado análisis de la importancia que tiene la
Trashumancia y sus Vías Pecuarias en Andalucía, que es un compendio de cultura
y buen hacer ganadero a lo largo de los siglos de historia. Esto es algo que
efectivamente hay que cuidar y potenciar.
El punto 6.4 de la página 90
se dedica a hacer una exhaustiva exposición de las Explotaciones y Censos en
Ganadería Extensiva en Andalucía. Aunque, es mucho esfuerzo el que se hace, la
falta de homogeneidad de los criterios de los que se parte ofrece unos
resultados poco clarificadores.
Las 23.916 explotaciones
ganaderas extensivas que aparecen en la página 23 y el número de cabezas de
ganado que aparecen en las páginas 90 y 91, 1.801.138 ovinos y caprinos, y los
202.565 bovinos, rematados con 1.281.501 cabezas de porcino ibérico, parece
claro que no debe ser el ganado que específicamente nos interese introducir
medioambientalmente en Andalucía como Ganadería Extensiva (¿número de animales
que pastorean, tierra pastoreada, porcentaje de pastoreo, ...?).
En fin, a partir de aquí
creemos que no hay ya posibilidad de seguir discutiendo estos datos y los
siguientes sobre producciones y consumo, porque desconocemos las fuentes
fiables de las que parte la Administración para poder clasificar las ganaderías
extensivas que pastorean en Andalucía, teniendo en cuenta que los pastos y
ganadería extensiva forman una unidad indisoluble.
Conclusiones
Desde el punto de vista de la
Fundación Savia esta Propuesta no responde adecuadamente a las necesidades y
problemática por la que atraviesa la Ganadería Extensiva, que se encuentra en
grave peligro de desaparición, sin protección legal y sin presupuesto
económico.
Su situación actual necesita
un giro copernicano, con respecto a la deriva en la que se encuentra social y
administrativamente, que ha de seguir un camino parecido al siguiente:
1. Hay que partir de una definición clara y
contundente que, con datos objetivos, deje claro que el ganado extensivo está
indisolublemente unido a los Pastos (integrado en el campo), y que constituye
un subsector que nada tiene que ver con la Ganadería Intensiva en sus formas de
entender y manejar el ganado a la hora de buscar rentabilidad para las
explotaciones (estabuladas y pienso).
2. Hay
que reorientar el pastoreo extensivo hacia la recomendación que hace la FAO
(Steinfiel et. al., 2006) para que los Servicios Medioambientales que presta a
la sociedad (paisaje, biodiversidad, conservación y mantenimiento de
ecosistemas, lucha contra el fuego, amortiguación del cambio climático,
fijación de población en el campo, etc) sea el producto primario (función
principal), y la producción ganadera (alimentos de abasto) sea el producto
secundario (función adicional).
3. Los
Servicios Medioambientales que los ganaderos de extensivo prestan a toda la
sociedad (función principal) son Servicios Públicos que tienen que ser
justamente remunerados a través de la Administración, como son remunerados
cualquiera de los Servicios Sociales que prestan otros ciudadanos para mejorar
la calidad de vida y salud del conjunto de la Sociedad.
4. La
valoración y regulación de los Servicios Medioambientales que los ganaderos de
extensivo (cuidadores del entorno natural) suministran a la sociedad, tienen
que sustentarse en una partida presupuestaria anual, aprobada y garantizada con
fondos europeos (procedentes del Fondo Financiero Plurianual (MFP)) que son los
que garantizan la labor social y medioambiental de los agricultores y ganaderos
europeos a través de la Política Agraria Común (PAC). Teniendo en cuenta que la
Unidad de Control sobre la que se ha de medir el resultado positivo del
Servicio Medioambiental prestado es la Hectárea Pastoreada (cuidadosamente
tratada, mantenida y conservada) y no la cabeza de ganado, individualmente
considerada, que hace las veces de herramienta fundamental para el ganadero en
su labor como conservador del entorno natural (y como bombero-avanzadilla en la
prevención del fuego) cuyo número (carga ganadera), especie (herbívora) y raza
(autóctona) ha de ir eligiendo y controlando en función del suelo y territorio
en el que se encuentre pastoreando.
5. La
Propuesta de Estrategia Andaluza para la Ganadería Extensiva debería ser
repensada sobre las premisas anteriores… y aprovechar la oportunidad que se nos
presenta para dar un salto de gran calado y abordar de forma valiente y
decidida la conservación, mantenimiento y protección de la gran cantidad de
Espacios Naturales Protegidos que tenemos (eminentemente ganaderos) y que
estamos obligados a preservar (Red Natura 2000), e incorporarla al Programa de
prevención del fuego que afecta a casi la mitad de nuestro territorio.